Fé

- Tienes que tener fé, seguir luchando

+ Fé? Fé en qué? En eso que tu llamas Dios? Ése que permite que le pasen las peores cosas a las buenas personas? Ése que deja que miles de personas mueran de hambre en el mundo a diario mientras otras se bañan en su exceso de riquezas? No, gracias..

- Pero tienes que tener fé en algo.. es lo que mueve el mundo. Sin ella te derrumbas, la vida no tiene sentido.

+ Está claro.. tengo fé. Fé en las personas. Fé en tí, en mi. Porque sabes? Al final somos nosotros solos los que tenemos que sobrevivir.

Lée[me]

Yo era de las que no les importaba nada; vendía una cara sin vergüenza, sin miedo a nada, dispuesta a ir hasta el final. ¿Qué me has hecho? Me siento pequeñita, quiero crecer, comerme el mundo y alcanzar la luna. No me dejas. Déjame. Deja de preguntarme que por qué no le olvido, que por qué sigo queriéndole, NO LE QUIERO. ¿No te das cuenta que es una excusa? Espabila! Abre los ojos! Léeme!

Vuélveme loca, abrázame, revuélveme el pelo, hazme la zancadilla, hazme cosquillas, hazme reír, enfádame y luego pídeme perdón, pero sobre todo no esperes que esas dos palabras salgan de mi boca para admitir que tu estás tan loco por mis rizos como yo por tus lunares.
Ven, y quítame hasta el aliento.

Pol2Car

Quisimos que todo esto no se convirtiera en un bucle del cual no pudiéramos salir y lo cumplimos. Ahora cada uno mira para un lado cuando nos cruzamos por la calle; de vez en cuando dejamos que se escape alguna sonrisa traicionera o alguna palabra aparentemente carente de significado, pero nunca cruzamos esa línea que tú y tu jodida manía de hacer de tu vida una película quisisteis trazar.

Ahora todo se antoja diferente.. he olvidado tu olor, tu sonrisa traviesa y tus ganas de comerte el mundo y todo se ve diferente. Renombré el color morado y mis suspiros cambiaron de coordenadas. 

Ha llegado el otoño, y con él nuevas perspectivas y aires de cambio. Después de un Septiembre caluroso, vuelvo a subir a la nube de la que  me estrellé, pero no te molestes en venir. Esta vez, traigo paracaídas y ninguna intención de utilizarlo, asi que, date media vuelta y vete con el viento.

Estado de felicidad

- Pero.. ¿estás bien, seguro? No quiero verte sufrir..
+ Seguro. Estoy bien..mejor que bien. Estoy en una nube, muy muy arriba. Tan arriba que lo que dejo abajo se hace tan insignificante que por momentos logro olvidar que existe. Los comentarios, hormiguitas, la envidia una leve brisa y todo lo demás pasa desapercibido.
- ¿Cómo lo haces?
+ ¿Cómo hago el qué?
- Pues.. eso, sacar el lado positivo, ignorar lo negativo. Siempre lo haces.
+ Cuando realmente tienes las cosas claras no es tan complicado. Es tan simple como poner las cosas en una balanza y ver qué es lo que realmente quieres o necesitas, qué es lo que te hace felíz. Siempre va a haber lados negativos, cosas que rompan ese estado de felicidad, claro que sí, pero es ahí donde tú eres quien debe darles su precio justo, su valor; y eso es algo que debes hacer tú sola, sin que nadie te influya, porque nadie mas que tú sabe lo que realmente te hace feliz.

1,2,3,4...

Van pasando los días y las muescas que empecé a trazar en el cabecero de mi cama cuando te marchaste se multiplican.   
Hoy puedo decirte que con cada lámina de serrín me hago un poco más fuerte y tu te proyectas a unos cuantos pasos más lejos.

También puedo decirte que se terminaron las dudas, las preguntas sin respuesta y los círculos viciosos en los que me veía inmersa tratando de comprender cómo te resultó tan fácil sacarme de tu vida. Que se acabó mi aroma en tu almohada, nuestra onomástica personal, la larga lista de “me gusta” que juntos comenzamos a escribir y las esperas cada noche a que se encienda la lucecita morada al sonido de un pájaro conocido. 

Porque, ¿sabes?, se te pasó quererme y a mi se me pasó darme cuenta.